• Preguntas y respuestas: Extirpación de la vejiga para tratar el cáncer vesical

Un anciano sentado a la mesaESTIMADA MAYO CLINIC:
¿Es la extirpación de la vejiga una alternativa razonable de tratamiento para una persona de 78 años con cáncer vesical que no invade el músculo? Mi padre ya ha intentado otras terapias sin mucho éxito, pero me preocupa que la extirpación de la vejiga sea algo muy difícil de manejar para él.

RESPUESTA:
En la situación que usted describe, la extirpación de la vejiga es un método razonable. El cáncer vesical puede ser mortal cuando no se lo trata agresivamente en esa etapa. Pese a que la cirugía es compleja, cuando la realiza un equipo experimentado y en un centro que ofrece apoyo prolijo al paciente, muchas de las personas que se someten a la extirpación de la vejiga se recuperan y están bien después de la operación.

El cáncer de la vejiga se divide en dos categorías amplias: con invasión del músculo y sin invasión del músculo. El cáncer con invasión del músculo es un tipo más avanzado de cáncer. Por ello, en la mayoría de los casos, normalmente se recomienda extirpar la vejiga de inmediato. En las personas que, como su padre, tienen cáncer vesical sin invasión del músculo, las células cancerosas todavía no han penetrado las estructuras profundas de la vejiga, como la pared muscular del órgano, y la extirpación de la vejiga no es siempre necesaria. En su lugar, podría haber otras alternativas de tratamiento adecuadas, como la inmunoterapia.

Ilustración médica del cáncer de la vejiga
Ilustración del cáncer de vejiga que muestra el tumor dentro de ella. El tumor visto a través del cistoscopio.

Sin embargo, cuando esas terapias no surten efecto para eliminar el cáncer o el mismo es de alto grado, lo que significa que corre peligro de crecer más agresivamente que un tumor de bajo grado y tiene más probabilidad de diseminarse a la pared muscular de la vejiga o a otros tejidos y órganos, entonces se recomienda extirpar la vejiga.

El tipo de cirugía que normalmente se aplica es la conocida como “cistectomía radical”. Esta operación implica no solo extirpar toda la vejiga, sino también parte de los uréteres y ganglios linfáticos circundantes. En los hombres, la cistectomía radical normalmente incluye también la extirpación de la próstata y de las vesículas seminales.

Parte de la cistectomía radical también consiste en reconstruir las vías urinarias para permitir la micción. Eso se puede lograr de varias maneras: el cirujano puede crear una vía para que la orina fluya desde los riñones y salga a través de una abertura en el abdomen hasta una bolsa recolectora que la persona lleva fuera del abdomen; otra posibilidad es que se construya quirúrgicamente una nueva vejiga con una parte del intestino delgado; y, otra alternativa más es crear un reservorio dentro de la pared abdominal para recolectar la orina, el cual hay que vaciar varias veces al día con una sonda.

La recuperación de la cirugía para extirpar la vejiga y el ajuste a los cambios que conlleva pueden ser complicados. No obstante, la mayoría de las personas lo logra cuando recibe atención médica en una institución que tiene un equipo de expertos experimentados en el manejo de las necesidades complejas de estos pacientes. En última instancia, la mayoría de las personas sometidas a la cirugía logran manejar los cambios en su estilo de vida y mantener la derivación urinaria por ellos mismos. Lo fundamental es recibir apoyo integral y educación después de la cirugía.

Hay que considerar varios factores antes de decidir si proseguir con la extirpación de la vejiga, entre ellos, otras enfermedades existentes, antecedentes médicos, apoyo social, movilidad y acceso a cuidado médico. La edad por sí sola no dictamina si una persona puede someterse a la cirugía. La mayoría de las personas que se someten a la extirpación de la vejiga debido a un cáncer vesical cursan la década de los 70 años.

Antes de que su padre tome la decisión, debe hablar con el cirujano sobre los riesgos y las ventajas de la extirpación de la vejiga para que juntos revisen la situación personal y decidan lo mejor ante las circunstancias.

Dr. Erik Castle, Urología de Mayo Clinic en Phoenix.

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