Molécula que se pensaba era enemiga del cáncer en realidad ayuda al crecimiento de tumores de tiroides
JACKSONVILLE, Florida - 28 de junio de 2012. Una molécula que se creía ampliamente que combatía algunas formas de cáncer, actualmente ayuda a que tumores mortales de tiroides crezcan, y las terapias para el cáncer que se estudian ahora en humanos podrían estimular la actividad de este recién descubierto chico malo, dicen los investigadores de la Clínica Mayo en Jacksonville, Florida.
Estos descubrimientos fueron publicados en el número en línea del Journal of Cell Science de este mes.
El estudio encontró que en el cáncer de tiroides anaplásico, el factor de transcripción Forkhead, FOXO3a, no es el útil supresor de tumor que todo el mundo pensaba que era, pero, en cambio, es un promotor letal del crecimiento del tumor. Cuando FOXO3a fue silenciado en modelos de laboratorio de cáncer de tiroides anaplásico humano, las células crecieron lentamente, pero cuando fue agregado, crecieron mucho más rápido.
"Este resultado es exactamente lo contrario a lo que esperábamos", dice el autor senior Dr. John Copland, un biólogo de cáncer. "Estábamos más que sorprendidos. Estábamos preocupados".
FOXO3a es conocido como un supresor del crecimiento del tumor porque responde a todas las formas de estrés de la célula, incluso la producida en cáncer, mediante la activación de los genes dentro del núcleo que disparan la muerte de la célula. A su vez, se sabe que el cáncer, apaga el FOXO3a enviándolo fuera del núcleo y dentro del citoplasma de la célula, donde es degradado. La molécula que transporta a FOXO3a fuera del núcleo es Akt, que intenta mantener las células de cáncer vivas.
El equipo de investigación usó un bloqueador Akt similar a los que se están usando ahora en los estudios clínicos de cáncer humano esperando aumentar FOXO3a nuclear y suprimir el crecimiento de cáncer de tiroides anaplásico. Estaban tratando de encontrar tratamiento para uno de los cánceres más mortales que se conocen, que alcanza a sólo el 2% de los casos de cáncer de tiroides en Estados Unidos, pero es responsable de alrededor de 40% de los muertes por cáncer de tiroides.
"El tema con el que estamos lidiando es que no hay tratamientos eficaces para este tipo de cáncer. Estos tumores son tan agresivos, porque hay tantas anormalidades genéticas", dice el coautor del estudio Dr. Robert Smallridge, endocrinólogo de la Clínica Mayo que trata a los pacientes con cáncer de tiroides. "Estamos estudiando lo que impulsa este tipo de cáncer y cómo se puede tratar".
El estudio mostró que FOXO3a se mantuvo en el núcleo, con el uso de un inhibidor de la Akt, y que en lugar de ayudar a eliminar las células cancerosas, FOXO3a estaba acelerando su crecimiento. Esto plantea la preocupación sobre el uso de inhibidores de Akt, ya que uno de los mecanismos es el de causar FOXO3a para permanecer activo en el núcleo.
"Hemos descubierto un interruptor biológico que convierte FOXO3a de un buen tipo en un mal actor, pero no sabemos lo que es, sin embargo, o en que tipos de cáncer esto podría suceder", dice la investigadora principal, Laura Marlow, una bióloga de la Clínica Mayo.
"Los investigadores del cáncer, incluidas las pruebas de los inhibidores de Akt, deben saber que FOXO3a tiene una actividad pro-cáncer, así como las propiedades anti-cáncer", dice el Dr. Copland. "La preocupación que debería plantearse es que un inhibidor Akt mejorará la retención de FOXO3a en el núcleo, causando que FOXO3a permanezca activa".
Sin embargo hubo algunas noticias esperanzadoras respecto a una potencial terapia para el cáncer. Los investigadores encontraron que FOXO3a se convierte en un gen determinado, ciclina A1, que promueve el crecimiento en las células cancerosas. Un miembro diferente de la familia de ciclina — ciclina A2 — es un oncogén conocido, pero antes de este estudio, nadie había demostrado que la ciclina A1 hace los mismo que la ciclina A2, dice Peter Storz, Ph.D., un biólogo del cáncer de la Clínica Mayo y co-autor.
"No se expresa tanto en los tejidos humanos y la encontramos altamente expresada en el cáncer de tiroides anaplásico", dice el Dr. Smallridge. "Y esto sugiere que alcanzar a la ciclina A1 puede ser una posible estrategia para tratar el cáncer de tiroides anaplásico".
El estudio fue financiado en parte por los Institutos Nacionales de Salud/Instituto Nacional del Cáncer, Comité de Investigación de la Clínica Mayo, Departamento de Salud de Florida Programa de Investigación de Cáncer Bankhead-Coley, un regalo de Alfred D. y Audrey M. Petersen, una subvención para cánceres raros de Dr. Ellis y Dona Brunton y Fondos Institucionales de Investigación de TGen.
Los co-autores incluyen a Christina von Roemeling; Simon Cooper, Ph.D.; Yilin Zhang; Stephen Rohl; Han Tun, M.D.; y Heike Doeppler, todos de la Clínica Mayo en Florida; Shilpi Arora, Ph.D.; Irma Gonzales, Ph.D.; y David Azorsa, Ph.D., todos de The Translational Genomics Research Institute (TGen); y Honey Reddi, Ph.D., de la Clínica Mayo en Rochester, Minnesota.
Para más información acerca del tratamiento del cáncer de tiroides, y de otros tipos de cáncer en la Clínica Mayo de Jacksonville, Florida, llamar al departamento de Servicios Internacionales al teléfono 904-953-7000 o enviar un email a intl.mcj@mayo.edu.
###
Información sobre Mayo Clinic
En el año 2014 se conmemoran 150 años de servicio a la humanidad de Mayo Clinic, entidad sin fines de lucro y líder mundial en atención médica, investigación y educación para gente procedente de todos los ámbitos de la vida. Si desea más información, visite: 150years.mayoclinic.org, MayoClinic.org o https://newsnetwork.mayoclinic.org/.
CONTACTO PARA LOS MEDIOS DE COMUNICACIÓN: Emily A. Hiatt Mayo Clinic Public Affairs, 507-284-5005, newsbureau@mayo.edu