Hay que considerar atentamente las alternativas de tratamiento ante el diagnóstico de cáncer de mama en etapa inicial
ESTIMADA MAYO CLINIC:
Acabo de descubrir que tengo cáncer de mama en etapa I y estoy intentando decidir a qué tipo de cirugía me someteré. El médico dice que puedo someterme a una mastectomía o a una tumorectomía. Estoy informándome sobre la tumorectomía, pero ¿cómo saber si eso es suficiente? Me preocupa que el cáncer reaparezca.
RESPUESTA:
Las investigaciones han demostrado que en las mujeres con cáncer de mama en etapa I, las tasas de supervivencia son muy similares entre quienes optan por una mastectomía parcial o tumorectomía seguida por radioterapia y las que eligen una mastectomía completa. La elección de la cirugía es algo muy personal y es importante que usted se tome su tiempo para considerar atentamente las alternativas.
La tumorectomía es la operación que se realiza para extirpar el cáncer de mama y un borde de tejido normal que circunda al tumor, conocido como margen. Esta cirugía permite conservar el resto del tejido mamario.
La mastectomía implica extirpar la mayor parte del tejido mamario del seno. En el cáncer de mama en etapa inicial, no se recomienda administrar radiación después de la mastectomía, a menos que se descubran células cancerosas en los ganglios linfáticos o que el tumor sea mayor de lo anticipado.
La reconstrucción mamaria es una alternativa después de la mastectomía y puede realizarse durante la misma cirugía o más adelante, dependiendo de la preferencia de la paciente. Las alternativas de reconstrucción incluyen recurrir a un implante mamario o al propio tejido de la paciente extraído de otra parte del cuerpo. En algunos casos, la mastectomía se puede realizar sin sacrificio del pezón ni de la areola (zona más oscura alrededor del pezón), lo que ofrece una apariencia más natural al seno después de la reconstrucción.
Algunas mujeres deciden someterse a una tumorectomía porque prefieren conservar la máxima cantidad posible del seno. En el cáncer de mama en etapa inicial, la tumorectomía generalmente ofrece un resultado estético bueno y no cambia mucho la apariencia del seno, aunque eso depende del tamaño del tumor y del seno mismo. La tumorectomía también dura menos tiempo, es menos invasiva y el tiempo de recuperación también es menor que el de la mastectomía.
Debido a que con la tumorectomía queda bastante cantidad de tejido mamario, es recomendable administrar radioterapia para reducir el riesgo de reaparición del cáncer. Un tipo de radioterapia, conocido como radiación de todo el seno con rayo externo, es el que más comúnmente se aplica después de la tumorectomía. La cantidad de radioterapia que se requiere administrar después de la tumorectomía normalmente lleva entre tres y seis semanas. La radioterapia generalmente se administra cinco días por semana, y cada cita dura una hora o menos.
La radiación parcial de la mama es una técnica más novedosa para ciertos tumores pequeños y de bajo grado, que permite administrar toda la radioterapia en cinco días. Este tratamiento puede realizarse con radiación de rayo externo, o mediante una sonda que se coloca en la mama durante la cirugía. Si usted opta por la tumorectomía, converse con el médico respecto al tipo de radioterapia que sería mejor en su situación.
Después de la tumorectomía y la radioterapia, la paciente todavía necesita realizarse una vez al año mamografías para detección de cáncer en ambas mamas. Después de la mastectomía, ya no es necesaria la mamografía en el lado operado, ni siquiera cuando se reconstruye el seno. No obstante, la mamografía todavía es necesaria en el seno restante.
A medida que piense en cuál cirugía elegirá, hable con el médico sobre todas las ventajas y desventajas. Haga preguntas y aclare todas las inquietudes que pueda tener. No prosiga sin antes sentirse cómoda, sabiendo que revisó toda la información necesaria a fin de tomar una buena decisión para usted.
Dra. Judy Boughey, Cirugía, Mayo Clinic de Rochester, Minnesota