La escala de Gleason indica la etapa del cáncer de próstata
ESTIMADA MAYO CLINIC:
Tengo 73 años y me hicieron una biopsia de la próstata que reveló un tumor maligno con una puntuación de 8 en la escala de Gleason. ¿Se considera esto un indicativo de cáncer agresivo, y en tal caso, qué alternativas de tratamiento tengo?
RESPUESTA:
La escala de Gleason indica la etapa del cáncer de próstata y mientras mayor sea la puntuación, más agresivo posiblemente sea el cáncer. Entre los factores relacionados con el cáncer de próstata que los médicos toman en cuenta para decidir el tratamiento, probablemente el más importante sea la puntuación en la escala de Gleason. Ante una puntuación de 8 en la escala de Gleason, en la mayoría de casos se recomendaría tratamiento con radioterapia y terapia hormonal o cirugía.
La escala de Gleason fue desarrollada en la década de los años 60 por el patólogo Donald Gleason y ha sobrevivido al paso del tiempo, hasta el punto que ahora los médicos confían en ella para predecir la probabilidad de crecimiento y diseminación del cáncer de próstata.
En la mayoría de tipos de cáncer, la etapa del tumor se determina mediante un examen microscópico que aplica un alto nivel de ampliación para analizar los detalles de las células cancerosas de la persona. Sin embargo, la escala de Gleason es diferente, pues el método permite al patólogo examinar microscópicamente y con baja ampliación las muestras del tejido prostático a fin de observar los patrones de las células cancerosas.
Luego, se asigna un número a cada patrón, que normalmente es de 3, 4 o 5. Debido a que muchos cánceres de próstata contienen más de un patrón, la puntuación en la escala de Gleason se compone de la suma de los dos patrones más comunes. Cuando los patrones son muy similares o existe solamente uno, entonces se asigna al cáncer el mismo número dos veces.
Por ejemplo, su puntuación de 8 en la escala de Gleason posiblemente proviene de dos patrones muy similares de 4 y 4. En ciertos casos, una puntuación de 8 puede provenir de un patrón de 5 y otro de 3, o de uno de 3 y otro de 5, pero eso no es lo común. El primer número identifica el patrón primario, o sea el que predomina más en la muestra; el segundo número, en cambio, corresponde al patrón secundario que se observa, pero que no está ampliamente diseminado como el primario.
La biopsia del cáncer de próstata también difiere de la de otros tipos de cáncer en la cantidad de muestras examinadas por el patólogo. Por lo general, en la biopsia de próstata se obtienen 12 muestras de tejido, en lugar de solamente una o dos, y algunas de ellas podrían tener puntuaciones diferentes en la escala de Gleason. Cuando eso ocurre, el patólogo asigna a la muestra la mayor puntuación observada.
No obstante, vale la pena mencionar que cuando solamente una o dos muestras obtienen un puntuación de 8 y las demás son menores, o algunas muestras no revelan ninguna evidencia de cáncer, entonces la perspectiva es mejor que cuando 9 de las 10 muestras obtienen un puntuación de 8. El médico tomará en cuenta esa información al evaluar la situación del paciente frente al cáncer.
El médico también revisará la cantidad o el porcentaje de cáncer presente en cada muestra. Si el porcentaje es bajo, la perspectiva general es mejor que si el porcentaje de tejido canceroso en las muestras es alto.
De manera general, al paciente que recibe una puntuación de 8 en la escala de Gleason se le recomienda recibir tratamiento, siempre y cuando no tenga otros problemas médicos que dificulten la administración de radioterapia o terapia hormonal y/o la cirugía. Dependiendo de la edad del paciente y de los números específicos que componen la puntuación de Gleason, los hombres con puntuaciones de 6 o 7 podrían no requerir tratamiento de forma inmediata, y en su lugar, los médicos quizás sugerirían un programa de vigilancia activa a fin de controlar estrechamente el cáncer y ver cómo avanza.
Antes de empezar el tratamiento en los pacientes con las puntuaciones más altas en la escala de Gleason, la mayoría de médicos sugiere realizar exámenes por imágenes, tales como una tomografía computarizada o estudios por resonancia magnética de la pelvis y abdomen, que permiten ver si el cáncer se ha diseminado más allá de la próstata y ayudan al médico a recomendar las mejores alternativas de tratamiento para la persona.
Dr. R. Jeffrey Karnes, Urología de Mayo Clinic en Rochester, Minnesota