• Entumecimiento y calambres en las piernas ameritan evaluación para determinar el origen y el tratamiento

Anciana con dolor en la piernaESTIMADA MAYO CLINIC:
Durante casi un año, he estado tomando medicamentos para tratar la arteriopatía periférica, pero no parecen ayudarme ni con el entumecimiento ni con los calambres en las piernas. ¿Son los estent siempre eficaces para tratar los síntomas de la arteriopatía periférica, o existe la posibilidad de que los síntomas continúen incluso con ellos?

RESPUESTA:
El entumecimiento y los calambres que usted siente pueden tener conexión con la arteriopatía periférica, aunque también pueden relacionarse con algo más. Informe al médico acerca de sus síntomas y solicite una evaluación para confirmar el origen. Si la arteriopatía periférica es la causa, busque más tratamiento, el cual puede incluir un procedimiento para destapar las arterias, como es la colocación de un estent. Además, existen otras alternativas.

La arteriopatía periférica afecta a las arterias que proveen oxígeno y nutrientes a los músculos de las piernas. La arteriopatía periférica ocurre cuando se acumula placa dentro de esas arterias y las estrecha o, a veces, las obstruye completamente. Cuando las arterias se estrechan u obstruyen, el oxígeno y los nutrientes de la sangre no logran llegar fácilmente a los tejidos ni a los músculos.

Un síntoma característico de la arteriopatía periférica son los calambres en las piernas al caminar, lo que normalmente pasa pocos minutos después de suspender la caminata. Otros síntomas pueden incluir entumecimiento, presión o debilidad en las piernas al caminar. Los síntomas atípicos de las piernas, tal como sentir cansada la pierna, pueden ser más comunes en la arteriopatía periférica que los síntomas de tipo calambre.

El tratamiento de primera línea para aliviar los síntomas de la arteriopatía periférica generalmente son los medicamentos. Por ejemplo, se puede recetar el fármaco cilostazol que aumenta la distancia que la gente con arteriopatía periférica puede caminar sin presentar síntomas en las piernas. Además, los medicamentos para controlar aquellas enfermedades subyacentes que pueden contribuir a la arteriopatía periférica, tal como el colesterol alto, la presión arterial elevada y la glucosa sanguínea alta, igualmente pueden aliviar los síntomas.

Realizar cambios en el estilo de vida también es una parte importante del tratamiento de la arteriopatía periférica. Fumar contribuye a la estrechez y daño de las arterias, además de empeorar la arteriopatía periférica. Si usted fuma, dejar el hábito es lo más importante que puede hacer para disminuir el riesgo de sufrir complicaciones por la arteriopatía periférica. Hacer ejercicio regularmente también es fundamental, porque el ejercicio ayuda al cuerpo a usar el oxígeno con mayor eficiencia y acondiciona los músculos. Ambas cosas pueden reducir los síntomas de la arteriopatía periférica.

Si controlar las enfermedades subyacentes, tomar medicamentos de alivio y hacer cambios en el estilo de vida no bastasen para mantener a raya a los síntomas, entonces sería el momento de valorar nuevamente la afección. Es posible que el entumecimiento y los calambres sean el resultado de otro problema médico diferente, tal como un trastorno relacionado con las venas o una afección que altera los nervios. Esos síntomas también pueden ser los efectos secundarios de ciertos medicamentos. Solicite al médico que revise sus medicamentos actuales para ver si esto es una posibilidad en su caso.

Si la valoración de su afección plantea que la arteriopatía periférica es la causa del entumecimiento constante y de los calambres en las piernas, entonces quizás desee considerar un procedimiento para destapar las arterias de las piernas. El procedimiento específico que se emplee dependerá del nivel, de la extensión y del tipo de obstrucción. En algunos casos, se coloca en la arteria un estent, o pequeño armazón de malla, para mantenerla abierta; se puede también inflar un pequeño globo dentro de la arteria para abrirla nuevamente y empujar la obstrucción contra la pared arterial, y otra alternativa es extraer la placa mediante un procedimiento llamado aterectomía.

En los casos graves de arteriopatía periférica, el médico puede recomendar un procedimiento para desviar la arteria afectada por la arteriopatía periférica. Se puede colocar en la pierna un injerto de revascularización, o baipás, creado con un vaso sanguíneo de otra parte del cuerpo o con un vaso sanguíneo hecho de material sintético para permitir que la sangre circule alrededor de la arteria estrecha u obstruida. En muchos casos, los procedimientos para destapar la arteria reducen o eliminan los síntomas de la arteriopatía periférica, aunque existe la posibilidad de que algunos síntomas perduren después del tratamiento.

Haga una cita para hablar con el médico acerca de sus síntomas y hágalos evaluar. Si están relacionados con la arteriopatía periférica, es probable que administrar más tratamiento y hacer cambios en el estilo de vida ayude con los síntomas y los reduzca hasta el punto de que sean manejables, aunque no los resuelva completamente.

Dr. Shahyar Gharacholou, Enfermedades Cardiovasculares de Mayo Clinic en Jacksonville, Florida. 

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