ROCHESTER, Minnesota — El síndrome de insuficiencia respiratoria aguda es la causa principal de insuficiencia respiratoria después de una cirugía. Los pacientes que desarrollan este trastorno pulmonar postoperatorio corren mayor riesgo de fallecer en el hospital, y quienes lo sobreviven pueden todavía presentar efectos físicos en años posteriores. Un estudio dirigido por Mayo Clinic ayuda a los médicos a identificar mejor a la mayoría de pacientes en peligro, lo que constituye el primer paso hacia la prevención de esta peligrosa y cara complicación quirúrgica. Los científicos descubrieron nueve factores de riesgo independientes, entre ellos, sepsis, cirugía vascular aórtica de alto riesgo, cirugía cardiaca de alto riesgo, cirugía de emergencia, cirrosis hepática, y reingreso al hospital desde otro lugar diferente al domicilio, tal como un asilo médico o casa de reposo.
Los resultados se publican en la revista Anesthesiology (Anestesiología).
“Este síndrome es una de las razones frecuentes por las que se requiere apoyo respiratorio durante más tiempo después de una operación, y aproximadamente 20 a 25 por ciento de los pacientes que lo desarrollan mueren por su causa”, comenta el primer autor Dr. Daryl Kor, anestesiólogo de Mayo Clinic. “Ha quedado bien documentado que quienes desarrollan este síndrome permanecen más tiempo en cuidados intensivos y su internación en el hospital es igualmente mayor, además de que el síndrome puede continuar repercutiendo sobre la persona durante varios años”.
La prevención del síndrome de insuficiencia respiratoria aguda se ha convertido en una prioridad para el Instituto Nacional del Corazón, Pulmón y Sangre, parte de los Institutos Nacionales de Salud, anotan los científicos.
Lo primero que los médicos deben hacer para prevenir la afección es identificar quiénes corren más riesgo, pero es difícil hacerlo con cada paciente, explican los científicos. El estudio analizó a 1562 pacientes quirúrgicos considerados con alto riesgo para desarrollar el síndrome y descubrió lo siguiente:
Los resultados podrían cambiar la forma en que se atiende en el quirófano a los pacientes con alto riesgo para el síndrome, acota el Dr. Kor.
“Por ejemplo, se puede ser un poco más conservador en la manera de transfundir productos sanguíneos, o realizar la ventilación pulmonar de forma un poco diferente a como se haría si la persona tuviese un puntaje más bajo”, dice el Dr. Kor. “Esperamos también que al identificar a los pacientes de alto riesgo, sea posible seleccionar mejor la población en estudios futuros para analizar métodos específicos de prevención. Anteriormente, dichos estudios no eran factibles de realizar porque no se podía identificar a los grupos de alto riesgo con ningún grado de exactitud.”
Las futuras investigaciones podrían incluir la función específica de la anestesia y determinar si es preciso modificar ciertos aspectos de los cuidados ofrecidos en el quirófano en los pacientes con alto riesgo de desarrollar el síndrome, añade el Dr. Kor.
Otros autores del estudio son médicos y científicos de Mayo Clinic en Rochester y Jacksonville, Florida, del Centro Médico Beth Israel Deaconess, de la Escuela de Medicina Albert Einstein, del Centro Médico Suroccidental de la Universidad de Texas, del Centro Médico de la Universidad de Duke, del Massachusetts General Hospital, de Ciencias de la Salud de la Universidad de Wake Forest, del Brigham and Women’s Hospital, de la Escuela de Medicina de la Universidad de Michigan y del St. Joseph Mercy Hospital. De igual manera, colaboró en el estudio el Grupo Estadounidense para Ensayos sobre Enfermedades y Lesiones Graves, financiado por los Institutos Nacionales de Salud.
El estudio se financió mediante un subsidio para desarrollo profesional de la Fundación para Educación e Investigación sobre Anestesia en Rochester, por los subsidios U01-HL108712-01, UL1 TR000135 y KL2 TR000136 de los Institutos Nacionales de Salud y por el Comité de Mayo Clinic para Investigación sobre Cuidados Intensivos.
###
Información sobre Mayo Clinic
En el año 2014 se conmemoran 150 años de servicio a la humanidad de esta entidad sin fines de lucro y líder mundial en atención médica, investigación y educación. Si desea más información, visite: 150years.mayoclinic.org, MayoClinic.org/espanol o https://newsnetwork.mayoclinic.org/.
CONTACTO PARA LOS MEDIOS DE COMUNICACIÓN:
Soledad Andrade, Relaciones Públicas de Mayo Clinic, 507-284-5005, correo electrónico: newsbureau@mayo.edu
ROCHESTER, Minnesota — La mayoría de los cálculos renales pueden ser expulsados por su cuenta. "Sin embargo, los cálculos renales que son demasiado grandes para[...]
ROCHESTER, Minnesota — Para muchas personas, una de las partes más incómodas de una colonoscopia es la preparación para el procedimiento. El propósito de una[...]
ROCHESTER, Minnesota — La radioterapia es un tratamiento común para el cáncer, ¿pero también podría ayudar a tratar los ritmos cardíacos perjudiciales? Mayo Clinic recientemente[...]