
ROCHESTER, Minnesota: Los pacientes con tres o menos tumores cerebrales s que reciben tratamiento con radiocirugía estereotáxica presentan menos deterioro cognitivo tres meses después del tratamiento que quienes se someten a la radiocirugía estereotáxica combinada con radioterapia en todo el cerebro. Esos son los resultados de un estudio realizado con financiamiento federal en varias instituciones, dirigido por Mayo Clinic y publicado hoy en la Revista de la Asociación Médica Americana. “Desgraciadamente, los tumores cerebrales metastásicos son comunes entre los enfermos de cáncer”, dice el Dr. Paul Brown, oncólogo radioterapeuta de Mayo Clinic y autor principal del estudio. Luego, comenta que si bien la radiocirugía estereotáxica brinda al médico la oportunidad de tratar los tumores y salvar el tejido cerebral sano, se ha demostrado que combinarla con radioterapia en todo el cerebro ayuda a controlar el crecimiento de los tumores cerebrales metastásicos. “Lo preocupante es que la radioterapia en todo el cerebro también afecta la función cognitiva, y fue por ese motivo que se estudió la aplicación de la radiocirugía estereotáxica sola”, añade el Dr. Brown. Entre febrero de 2002 y diciembre de 2013, los científicos inscribieron a 213 pacientes y los asignaron aleatoriamente a tratamiento con radiocirugía estereotáxica sola (111) o radiocirugía estereotáxica sumada a radioterapia en todo el cerebro (102). Los científicos descubrieron menos deterioro cognitivo a los tres meses en los pacientes tratados con solo la radiocirugía estereotáxica. La calidad de vida también fue mayor a los tres meses entre los pacientes tratados solamente con radiocirugía estereotáxica. No hubo ninguna diferencia significativa entre los grupos de tratamiento en cuanto a la autosuficiencia funcional a los tres meses. El promedio general de supervivencia fue de 10,4 meses en los pacientes tratados con radiocirugía estereotáxica sola y de 7,4 meses en los pacientes tratados con radiocirugía estereotáxica y radioterapia en todo el cerebro.
ROCHESTER, Minnesota: Los científicos del Centro para Medicina Personalizada de Mayo Clinic descubrieron un nuevo y esperanzador medio de controlar y tratar la recurrencia del cáncer de ovario, enfermedad difícil de detectar que cobra muchas vidas. La nueva investigación del Dr. George Vasmatzis, del Departamento de Medicina de Laboratorio y Patología de Mayo Clinic, descubrió que las biopsias líquidas de los análisis de sangre y la secuenciación del ADN son capaces de detectar la recurrencia del cáncer de ovario mucho antes de que reaparezca el tumor. Eso puede conducir a intervenciones más tempranas y eficaces, con tratamiento personalizado. La investigación del Dr. Vasmatzis sobre la “Cuantificación de Rearreglos de Cromosomas Somáticos en ADN Libre en Sangre Circulante del Cáncer de Ovario” se publica en la edición del 20 de julio de Scientific Reports (Informes Científicos). “Con las biopsias líquidas, no hay que esperar a que crezca el tumor para obtener una muestra de ADN”, afirma el Dr. Vasmatzis. “Este importante descubrimiento permite detectar la recurrencia de la enfermedad antes que otros métodos diagnósticos. Las biopsias líquidas pueden repetirse para controlar el avance del cáncer y eso brinda la esperanza de un mejor plan de tratamiento a medida que transcurre el tiempo”, añade. El estudio se realizó en 10 pacientes con etapa avanzada de cáncer de ovario. La sangre se extrajo antes y después de la cirugía. Los investigadores compararon el ADN en la sangre de las biopsias líquidas con las muestras de ADN del tejido tumoral mediante secuenciación pareada, o sea una secuenciación de todo el exoma que es barata y capaz de revelar los cambios genéticos que contribuyen al crecimiento del tumor.
Los estudios revelan la capacidad de esta combinación para destruir mejor al cáncer en ratones PHOENIX: Una combinación farmacológica creada para mejorar la capacidad del sistema inmunitario para apuntar contra las células cancerosas y atacarlas mostró un efecto terapéutico pronunciado en el cáncer avanzado y con metástasis en ratones, indica un estudio de Mayo Clinic publicado en la edición del 12 de julio en la revista electrónica Oncotarget. “El cáncer puede permanecer dentro del cuerpo sin hacerse notar durante meses o años antes de causar grandes problemas, y eso lleva al sistema inmunitario a coexistir con el cáncer en lugar de atacarlo”, explica el inmunoterapeuta oncológico de Mayo Clinic, Dr. Peter Cohen, que codirigió el estudio con la inmunóloga de Mayo Clinic, Dra. Sandra Gendler, y con la fellow posdoctoral, Dra. Soraya Zorro Manrique. “Se probó a los agonistas del receptor de tipo toll (TLR, por sus siglas en inglés) —que imitan a las bacteria invasivas— como una táctica de engaño al sistema inmunitario para que ataque al cáncer como si fuese una infección mortal. Debido a que la quimioterapia puede mejorar la inmunoterapia, se examinó también la combinación de los agonistas del TLR con más de 10 sustancias quimioterapéuticas”, dice el Dr. Cohen, quien luego añade que el equipo de Mayo Clinic dirigió el tratamiento hacia los ratones modelo que padecían, entre otros, los tipos más agresivos de cáncer de mama (conocido como 4T1) y de cáncer de páncreas (conocido como Panc02).
Es bien sabido que el ejercicio disminuye el riesgo de desarrollar cáncer. Los estudios revelan una disminución de 25 por ciento en el riesgo de cáncer de mama entre las mujeres con la mayor actividad física, comparado frente a las que hacen la menor actividad física. Esa función protectora del ejercicio se observa en muchos otros cánceres, entre ellos, de pulmón, de endometrio, de colon y de próstata; pero ¿sabía que el ejercicio es igualmente útil durante y después del tratamiento contra el cáncer? Según la Sociedad Americana contra el Cáncer, las investigaciones revelan que hacer ejercicio durante el tratamiento contra el cáncer puede mejorar el funcionamiento físico y la calidad de vida. El ejercicio moderado puede: Aumentar la fuerza y la resistencia Fortalecer el sistema cardiovascular Disminuir la depresión Reducir la ansiedad Disminuir el cansancio Mejorar el ánimo Aumentar la autoestima Reducir el dolor Mejorar el sueño
ESTIMADA MAYO CLINIC: ¿Se recomienda alguna vez ácido fólico a una persona común y corriente o solamente a las mujeres embarazadas? RESPUESTA: El ácido fólico es la versión sintética (fabricada en el laboratorio) de una vitamina B llamada folato, que es muy conocida por su función en la prevención de defectos congénitos en el cerebro y la columna vertebral; por ese motivo, a menudo, se la incluye en algunos alimentos fortificados como cereales para el desayuno y fideos. Sin embargo, el ácido fólico también influye de otras maneras, como sobre la salud del corazón y del cerebro. Igual que con toda vitamina o suplemento mineral, primero averigüe el asunto antes de empezar a tomar ácido fólico. En algunos casos, un suplemento sería adecuado, pero puede ser que tomar demasiado ácido fólico conlleve riesgos. El folato se encuentra en ciertos alimentos de forma natural. Las verduras de hoja verde oscura, las leguminosas, los guisantes (arvejas o chícharos) y los frutos secos tienden a ser ricos en folato. La importancia del folato radica en que ayuda a garantizar que el proceso de crecimiento de nuevas células sea sano y en que desempeña un papel en varias actividades bioquímicas normales. El ácido fólico es un componente fundamental de las vitaminas prenatales y normalmente se lo incluye en los suplementos multivitamínicos y del complejo de vitaminas B, aunque también se puede adquirir un suplemento de ácido fólico solo. Si bien es claro que los suplementos de ácido fólico son un medio importante de prevenir defectos congénitos, la repercusión del ácido fólico es menos directa en otros aspectos de la salud, entre ellos: Deficiencia de vitamina B12. Alrededor de 10 a 15 por ciento de ancianos no obtiene suficiente cantidad de vitamina B12. Las razones para ello pueden ser muchas, aunque lo más común es que se deba a problemas con la absorción gastrointestinal. La deficiencia de vitamina B12 puede ocasionar anemia, así como problemas cerebrales y nerviosos, tales como confusión mental, olvidos y constante hormigueo en las manos y los pies. La deficiencia de ácido fólico puede causar el mismo tipo de anemia, llamada anemia macrocítica, pero no problemas neurológicos. Ingerir más ácido fólico puede solucionar la anemia, incluso ante deficiencia de vitamina B12, pero no los problemas neurológicos. Por ello, es importante asegurarse que no haya deficiencia de vitamina B12 antes de tratar la anemia macrocítica con ácido fólico. Si la deficiencia de vitamina B12 está presente, la anemia mejorará con ácido fólico, pero el daño neurológico avanzará y se volverá permanente.
ROCHESTER, Minnesota: La terapia dirigida del everolimus puede combinarse sin peligro con la quimioterapia R-CHOP en el linfoma difuso de células B grandes que se ...
Una comunidad en línea que brinda apoyo a los pacientes